Convivencia
Ayer me encontraba bastante débil así que al salir de trabajar me fui directamente a casa. No estoy acostumbrada a llegar tan temprano así que la compañera de piso nº 1 se asombró al verme entrar y me preguntó que qué me pasaba. Le dije que creía que tenía fiebre o algo así. Más tarde llegaron las compañeras 2 y 4. Yo estaba en la habitación escuchando los partidos en la radio mientras leía un poco. Les extrañó no encontrarme en el salón (todas las noches nos sentamos un rato y, mientras cenamos, comentamos cómo nos ha ido el día) y vinieron a llamar a mi puerta.
Sentir que se preocupan por mi es una muestra más de que hace bastante que hemos dejado de ser unas conocidas que comparten piso, lo cual (llevo unas cuantas mudanzas a mis espaldas) no es fácil de encontrar en esta ciudad en la que casi todos estamos de paso. Entrar en esa casa te transmite tranquilidad y siempre hay alguien con quien te puedes reír o desahogar si has tenido un mal día. No quiero olvidar lo afortunada que me siento teniendo ese privilegio de amigas.
3 comentarios
miss lucifer -
OUT -
Luk -