MADO
Este fin de semana se celebra en Madrid el Orgullo Gay (http://www.elmundo.es/metropoli/2006/06/26/musica/1151317541.html ), para mi no es una fiesta cualquiera, haber vivido durante casi dos años en la mismísima plaza de Chueca implica que la siga disfrutando como si la calle Pelayo y alrededores fuesen todavía mi barrio.
Recuerdo que, tras el pregón a mitad de semana en el centro neurálgico de la ciudad estos días, comenzaba el espectáculo que se prolongaba hasta casi la una de la madrugada, era imposible no unirte a él ya que estuvieses donde estuvieses (incluido el patio de la cocina que era la parte más interior de la casa) oías la música. Eso sí, el viernes asumías que esa noche no ibas a dormir nada y el sábado que ya no podrías entrar en el portal porque la masa de gente te lo impediría hasta la mañana siguiente. Es curioso como algo que puede resultar molesto en un momento se puede echar de menos con el tiempo.
Siempre que paseo por esas calles, sean o no estas fechas, las considero como un poco mías, quizás sea porque me he sentido un poco parte de ellas, de su bullicio, de sus molinillos de colores, de sus tiendas, de su gente, de su extravagancia, ...
He disfrutado mucho viviendo ahí, sobrevolando los tejados con la mirada desde esa terraza de un quinto y soleado piso de alquiler.
3 comentarios
Yo -
Exactamente, la música que se oirá en este fin de semana se parece mucho a la del "Milagro", ¿Cuanto hace ya de eso? Somos unos abuelos...
M. I: -
miss lucifer -