Blogia
SAUDADE

Última semana

Cuando la viguesa me preguntó si podía quedarse en nuestra casa durante tres semanas (nada más y nada menos) sin pensarlo dije que sí, le expliqué que allí tenemos colchones y que a mi sinceramente no me importaba compartir mi habitación, mi espacio y mi tiempo con ella, que si no le resultaba incómodo dormir en el suelo durante tanto tiempo no había más que hablar. Se vino. Pensé que se haría largo pero no ha sido así, este viernes se marcha.
Uno de mis grandes defectos, soy absolutamente consciente de ello, es mi carácter (a veces) extremadamente independiente, la necesidad de ir a mi aire y de que respeten mi temporal autismo. Esto provoca que en ocasiones resulte distante y fría, que no me integre en un plan porque tenga otro (en el que sólo estoy yo, conmigo misma) y eso choque a los demás, como si les despreciase o algo así. Es una rara necesidad de oxígeno, si no la satisfago me ahogo.
Por eso creía que no iba a superar la larga convivencia... erré. No ha supuesto ningún esfuerzo, es más, me ha gustado bastante. Echaré de menos levantarme despacio por las mañanas, haciendo el menor ruido posible para no despertarle, andar de puntillas y encender solamente la pequeña luz de la mesilla. Volver de trabajar y que me cuente qué tal ha ido el día. Ha caído bien a todas y ya le han insistido para que vuelva.
Ha sido un "autoexamen" para mi y lo he aprobado con nota. Quizás no sea tan independiente como creía...

1 comentario